miércoles, 15 de julio de 2015

EMPEZAR, OTRA VEZ

     Zoé se marchó unos días de vacaciones con sus padres. Pidió a su tía que no le mandara nada durante esos días, porque no tenía Internet y no lo iba a ver. Ha sido poco tiempo, la familia ha tenido que renunciar a unas vacaciones largas para que Zoé pudiera estudiar. 
     Ella se siente culpable de influir de forma negativa en la vida familiar. Parece, además, que su manera de disfrutar de esos pocos días no ha gustado mucho a sus padres. Se ha olvidado por completo de su planificación. Ellos no querían intervenir, ya que las primeras semanas habían funcionado muy bien evitando la presión y confiando en la responsabilidad de Zoé, pero no había más que verles las caras. 
     Las cosas están, otra vez, tensas y, además, Zoé siente que se le han ido las ganas. Ha perdido el ritmo, no ha cumplido con lo programado y cree que ahora no va a tener tiempo para hacer lo que le queda, que es mucho. Por otro lado, septiembre parece lejano, todavía, y tampoco tiene la motivación de otros días de relajación y diversión como los que ha pasado.
     Cuando, de vuelta a casa abre el correo, lo que su tía le ha enviado como bienvenida va sin comentarios:


viernes, 10 de julio de 2015

APRENDER

     Zoé se está enfrentando a textos complejos y largos. La recomendación de su tía es que los "trocee", que se fije en una parte y que reflexione sobre ella. Lo mejor es que es ella la que puede elegir. En esta ocasión, puesto que el verdadero trabajo de Zoé durante este verano es aprender lo que no ha conseguido durante el curso, se le propone un reto: averiguar cómo lo que está estudiando se relaciona con su propia vida. No hace falta que encuentre conexión con todo, pero sí que vea que, lo que hace, sirve para algo. Seguro que así se encuentra más motivada.
     Como mínimo, todo este esfuerzo sirve para conseguir la primera meta que se ha propuesto: sacarse el curso en septiembre y seguir estudiando. Ya tiene un objetivo. Tendrá que continuar marcándose otras metas para el futuro, el inmediato y el lejano. Solo ella puede decidir cuáles son.
     
CARTA A UN AMIGO (TEXTO ATRIBUIDO A WILLIAM SHAKESPEARE)


APRENDERÁS...

Después de algún tiempo aprenderás la diferencia entre
dar la mano y socorrer a un alma...
Y aprenderás que
amar no significa apoyarse, y que compañía no siempre
significa seguridad...
Comenzarás a aprender que los besos no son contratos,
ni regalos, ni promesas...
Comenzarás a aceptar tus
derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente,
con la gracia de un adulto y no con la tristeza de un
niño...
Y aprenderás a construir hoy todos tus
caminos, porque el terreno de mañana es incierto para
los proyectos y el futuro tiene la costumbre de caer
en el vacío.
Después de un tiempo aprenderás que el sol quema si te
expones demasiado...
Aceptarás que incluso las
personas buenas podrían herirte alguna vez y
necesitarás perdonarlas...
Aprenderás que hablar
puede aliviar los dolores del alma...
Descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos
segundos destruirla,
y que tú también podrás hacer
cosas de las que te arrepentirás el resto de la vida...
Aprenderás que las verdaderas amistades continúan
creciendo a pesar de las distancias...
Y que no importa
qué es lo que tienes, sino a quién tienes en la vida...
Y que los buenos amigos son la familia que nos
permitimos elegir...

Aprenderás que no tenemos que cambiar de amigos, si
estamos dispuestos a aceptar que los amigos cambian...
Te darás cuenta que puedes pasar buenos momentos con
tu mejor amigo haciendo cualquier cosa o nada,
solo por el placer de disfrutar su compañía...
Descubrirás que muchas veces tomas a la ligera a las
personas que más te importan y por eso siempre debemos
decir a esas personas que las amamos, porque nunca
estaremos seguros de cuándo será la última vez que las
veamos...

Aprenderás que las circunstancias y el ambiente que
nos rodea tienen influencia sobre nosotros, pero
nosotros somos los únicos responsables de lo que
hacemos...

Comenzarás a aprender que no nos debemos
comparar con los demás, salvo cuando queramos
imitarlos para mejorar...
Descubrirás que se lleva mucho tiempo
para llegar a ser la persona que quieres ser, y que el
tiempo es corto.

Aprenderás que no importa a dónde llegaste, sino a
dónde te diriges y si no lo sabes cualquier lugar
sirve...

Aprenderás que si no controlas tus actos,
ellos te controlarán y que ser flexible no significa ser débil
o no tener personalidad,
porque no importa cuán
delicada y frágil sea una situación:
siempre existen dos lados.

Aprenderás que héroes son las personas que hicieron lo
que era necesario, enfrentando las consecuencias...

Aprenderás que la paciencia requiere mucha práctica.

Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas
que te patee cuando te caes, tal vez sea una de las
pocas que te ayuden a levantarte.

Madurar tiene más que ver con lo que has aprendido de
las experiencias, que con los años vividos.

Aprenderás que hay mucho más de tus padres en ti de lo
que supones.

Aprenderás que nunca se debe decir a un niño que sus
sueños son tonterías, porque pocas cosas son tan
humillantes y sería una tragedia si lo creyese porque
le estarás quitando la esperanza...

Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a
tenerla, pero eso no te da el derecho de ser cruel...

Descubrirás que solo porque alguien no te ama de la
forma que quieres, no significa que no te ame con todo
lo que puede, porque hay personas que nos aman, pero
que no saben cómo demostrarlo...

No siempre es suficiente ser perdonado por alguien,
algunas veces tendrás que aprender a perdonarte a ti
mismo...

Aprenderás que con la misma severidad con que juzgas,
también serás juzgado y en algún momento condenado...

Aprenderás que no importa en cuántos pedazos tu
corazón se partió, el mundo no se detiene para que lo
arregles...

Aprenderás que el tiempo no es algo que pueda volver
hacia atrás, por lo tanto, debes cultivar tu propio
jardín y decorar tu alma, en vez de esperar que
alguien te traiga flores.

Entonces y solo entonces sabrás realmente lo que
puedes soportar; que eres fuerte y que podrás ir mucho
más lejos de lo que pensabas cuando creías que no se
podía más.

Es que realmente la vida vale cuando tienes el valor
de ¡enfrentarla!

jueves, 9 de julio de 2015

PROMESAS CUMPLIDAS

     Para seguir con la buena racha. Para convertir todas las rachas en buenas rachas:
Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarte un día sin saber qué hacer,
tener miedo a tus recuerdos

Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quieres,
abandonarlo todo por miedo,
no convertir en realidad tus sueños.

Queda prohibido no demostrar tu amor,
hacer que alguien pague tus dudas y mal humor.

Queda prohibido dejar a tus amigos,
no intentar comprender lo que vivieron juntos,
llamarles sólo cuando los necesitas.

Queda prohibido no ser tú ante la gente,
fingir ante las personas que no te importan,
hacerte el gracioso con tal de que te recuerden,
olvidar a toda la gente que te quiere.

Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo,
no creer en Dios y hacer tu destino,
tener miedo a la vida y a sus compromisos,
no vivir cada día como si fuera un último suspiro.

Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte,
olvidar sus ojos, su risa, todo,
porque sus caminos han dejado de abrazarse,
olvidar su pasado y pagarlo con su presente.

Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen más que la tuya,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.

Queda prohibido no crear tu historia,
dejar de dar las gracias a Dios por tu vida,
no tener un momento para la gente que te necesita,
no comprender que lo que la vida te da,
también te lo quita.

Queda prohibido no buscar tu felicidad,
no vivir tu vida con una actitud positiva,
no pensar en que podemos ser mejores,
no sentir que sin ti este mundo no sería igual.
PABLO NERUDA 

miércoles, 8 de julio de 2015

REFLEXIONAR Y ACTUAR

     Zoé se siente hoy confusa, entre motivada y triste. El poema de ayer tiene un mensaje muy claro: hay que responsabilizarse de los propios actos, ser consecuente y no culpar a nadie. Sin embargo, si no hay otro, la culpable de sus fracasos será ella. Eso la desazona mucho.
      Vuelve a leer el poema y parece que se abren un pocos los nubarrones sobre su cabeza. Parece que la buena noticia es que si uno es responsable y consecuente, puede aprender y cambiar, puede hacer lo que quiera hacer. A eso se refiere todo el mundo cuando le habla de los estudios, ¿no? A que actúe como crea ella que tiene que actuar para conseguir lo que ella quiera conseguir. Aunque cueste un poco de esfuerzo, luego merecerá la pena.
     La verdad es que lleva unos días trabajando con la planificación que se ha hecho y le va bien. Ha seguido algunos de los consejos que le han dado y parece que dan resultado. Se plantea objetivos para un día y cuando los ha cumplido queda con sus amigos, se va a la piscina, ve una peli, navega un poco por Internet... Incluso está buscando información sobre los escritores que está conociendo últimamente y leyendo más cosas suyas, solo porque le apetece.
     Está esperando el regalo de su tía para hoy y cuando lo escucha (porque esta vez es una canción) cree que le viene como anillo al dedo...

     Y eso que a ella pensaba que no le gustaba este tipo de música "antigua", pero se fija muy bien porque sabe que su tía no da puntada sin hilo y que algo le quiere decir. No entiende muy bien la letra, pero sí entiende que es animosa y está claro que de vez en cuando necesita volver a motivarse porque pierde un poco las ganas; también entiende "think" y "freedom" que son las palabras que más se repiten en la canción. Y eso es lo que hace que se identifique. Está pensando en lo que quiere hacer y está empezando a actuar en consecuencia. Hacer lo que tiene que hacer le permite sentirse más libre, nadie se mete con ella. Sus padres están viendo que está estudiando y la dejan en paz. Ya les ha explicado cómo se está organizando, así que les cuenta lo que le corresponde para el día y, si descansa o lo deja un rato, nadie va detrás a recriminarle o a recordarle que debe trabajar. Por la noche charlan un rato de cómo se ha conseguido el objetivo. 
     Hasta la han felicitado por algunas de las cosas que ha aprendido o trabajos que ha hecho. Todos se sienten mucho mejor. Se está dando cuenta que es verdad que vale la pena seguir.

martes, 7 de julio de 2015

NO CULPES A NADIE

     Zoé recibe un nuevo envío de su tía. Esta vez le pide que con la lectura atenta reflexione y pueda aplicar estas reflexiones. 

“Nunca te quejes de nadie, ni de nada,
porque fundamentalmente tú has hecho
lo que querías en tu vida.
Acepta la dificultad de edificarte a ti mismo
y el valor de empezar corrigiéndote.
El triunfo del verdadero hombre
surge de las cenizas de su error.
Nunca te quejes de tu soledad o de tu suerte,
enfréntala con valor y acéptala.
De una manera u otra es el resultado de tus actos
y la prueba que has de ganar.
No te amargues de tu propio fracaso
ni se lo cargues a otro,
acéptate ahora o seguirás justificándote como un niño.
Recuerda que cualquier momento es bueno para comenzar
y que ninguno es tan terrible para claudicar.
No olvides que la causa de tu presente es tu pasado
así como la causa de tu futuro será tu presente.
Aprende de los audaces, de los fuertes,
de quien no acepta situaciones,
de quien vivirá a pesar de todo.
Piensa menos en tus problemas y más en tu trabajo
y tus problemas, sin eliminarlos, morirán.
Aprende a nacer desde el dolor
y a ser más grande que el más grande de los obstáculos,
mírate en el espejo de ti mismo
y serás libre y fuerte y dejarás de ser un títere de las circunstancias
porque tu mismo eres tu destino.
Levántate y mira el sol por las mañanas
y respira la luz del amanecer.
Tú eres parte de la fuerza de tu vida,
ahora despiértate, lucha, camina, decídete
y triunfarás en la vida;
nunca pienses en la suerte,
porque la suerte es el pretexto de los fracasados.”
PABLO NERUDA
     
     Se trata de su vida: de aceptar los fracasos y de vivir con fuerza el presente que creará su futuro. 

lunes, 6 de julio de 2015

ZOÉ QUIERE MÁS RESPUESTAS

     Zoé ha quedado impactada con la música y los poemas. Ha hablado con su tía de que se siente mejor, más motivada, con más posibilidades. Su tía le ha hecho ver que esto es algo que puede hacer ella misma. Le ha propuesto crearse una lista de canciones que le gusten y que le suban el ánimo para que encuentre la fuerza para hacer lo que tiene que hacer. En su planificación de estudio puede temporizar un rato para escuchar música motivadora y otro rato para leer alguno de los textos o poemas que está descubriendo. Incluso, esas lecturas nuevas pueden servir para alguno de los trabajos que tiene que hacer para septiembre o se pueden relacionar con alguna de las asignaturas (lengua y literatura, historia, filosofía...).
     La tía de Zoé tiene buenas ideas. Se ha comprometido a ayudarla con los textos y las canciones, le proporcionará algo nuevo cada día. Como le ha gustado Benedetti, el siguiente poema es también suyo y, además, es una declaración de intenciones:

Compañera 
usted sabe 
puede contar 
conmigo 
no hasta dos 
o hasta diez 
sino contar 
conmigo 

si alguna vez 
advierte 
que la miro a los ojos 
y una veta de amor 
reconoce en los míos 
no alerte sus fusiles 
ni piense qué delirio 
a pesar de la veta 
o tal vez porque existe 
usted puede contar 
conmigo 

si otras veces 
me encuentra 
huraño sin motivo 
no piense qué flojera 
igual puede contar 
conmigo 

pero hagamos un trato 
yo quisiera contar 
con usted 

es tan lindo 
saber que usted existe 
uno se siente vivo 
y cuando digo esto 
quiero decir contar 
aunque sea hasta dos 
aunque sea hasta cinco 
no ya para que acuda 
presurosa en mi auxilio 
sino para saber 
a ciencia cierta 
que usted sabe que puede 
contar conmigo.

miércoles, 1 de julio de 2015

MÁS RESPUESTAS

     Aún un envío tiene que sorprender a Zoé de un poema atribuido a Mario Benedetti. Sin duda, la ha tocado, va a tener que reflexionar mucho...
No te rindas, aún estás a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos,
No te rindas por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada día es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estas sola,
porque yo te quiero.

MÁS PREGUNTAS, MÁS RESPUESTAS

     La tía de Zoé no se muestra ofendida ni sorprendida. Eso sí, intenta explicarse un poco mejor. Está muy bien que su sobrina se reafirme, busque aquello en lo que cree, se busque a sí misma. Ello no significa que deje de buscar y mejorar. Y no tiene que intentar ser quien no es, sino encontrar su mejor versión y perfeccionarla cada día. Como ella quiera, sin presión.
 "Errar es humano [...], rectificar es de sabios" dice un poeta.
     Insiste, si algo no va bien, si algo no le gusta, si algo no la hace feliz... debe cambiarlo. Aquello de lo que esté segura y quiera mantener en su vida, debe ser aquello que la haga feliz. Zoé es la que decide, a tiempo está.


 

INMOVILISMO

     Zoé ha utilizado la misma técnica de su tía y le ha contestado:

 Sabe que a su tía le va a gustar, es moderna. Pero no sabe lo que le va a decir por el mensaje. Es que Zoé siente que no puede cambiar. Y hay cosas que no quiere cambiar. De todos modos, se pregunta si estará siendo un poco brusca con su tía.

lunes, 29 de junio de 2015

BUSCAR RESPUESTAS

     La tía de Zoé le ha enviado una canción para que la escuche. Con ella tiene una relación especial desde que era pequeña, aunque últimamente ya no hablan tanto. Zoé también se ha distanciado de ella, pero es normal, se está haciendo mayor y tiene otros intereses.
     La madre de Zoé le contó a su tía el bache por el que está pasando. Y esta ha sido su respuesta:


     Zoé intenta entender. La canción se llama "Better than I am". Dice algo así como "Solo quiero ser mejor de lo que soy". 
     La verdad es que ha conseguido mejorar su humor. Y, sin embargo, la respuesta ha generado más preguntas.

LA ACEPTACIÓN

     Ya han pasado unos días desde que Zoé enseñó las notas a sus padres. Lógicamente, la reacción y el posterior ambiente en casa no fueron buenos. Parece que la cosa se va normalizando, pero ella no se siente mejor. 
     Tras la charla de sus padres Zoé se limitó a darles la razón en todo, es cierto que ella tiene la culpa de los malos resultados por no haber estudiado. También es cierto que no está siendo responsable y se ha comprometido a cambiar. Pero, ahora se pregunta: ¿Cómo? Es consciente de que tiene que hacer algo, pero no sabe qué. 
     Sus padres le han ofrecido ir a una academia para que la preparen para los exámenes de septiembre. Por supuesto ha accedido, no cree que quede más remedio, aunque ello signifique quedarse prácticamente sin vacaciones. Ella y el resto de su familia que se va a tener que sacrificar por su culpa, también económicamente. Se siente fatal. Y lo que es peor, no se ve capaz.
     Su tutora, cuando le entregó el boletín de notas, le dijo algo inquietante: "No olvides qué quieres y ve a por ello". No es que haya olvidado nada, es que no se ha planteado lo que quiere. De momento lo que tiene que hacer es aprobar el curso, es obligatorio sacarse la ESO. ¿Es eso lo que ella quiere? ¿Acaso hay otra opción? Todo esto la confunde.
     A Zoé le gustaría se un poco como su mejor amiga. Se podría decir que su amiga es una "empollona", aunque es muy maja. Ella no tiene problemas con los estudios, se saca cada curso con notas espectaculares y sus padres están contentos. Además, consigue sacar tiempo para hacer todo lo que le gusta. De hecho es una de las que más sale del grupo de amigos. Zoé se pregunta cómo lo hace, pero entre ellas hay una especie de pacto para no hablar de los estudios porque les resulta algo incómodo. Es posible que ahora Zoé deba romper el hielo y expresar abiertamente a su amiga sus dudas. La cuestión es que le da mucha vergüenza porque no se siente tan lista.
     Zoé tiene que desliar esa madeja. Para ello, primero tiene que hablar de lo que siente para que las personas que la quieren la puedan ayudar. No importa cuál sea el problema, siempre hay una solución, y lo que hay que hacer es encontrarla. Tampoco importa que uno necesite ayuda para encontrar esa solución o para llevarla a cabo. Por ejemplo, si el problema es que Zoé no se sabe organizar, quizá sus padres o sus profesores le pueden mostrar maneras de hacerlo; si tiene problemas de comprensión, en una academia o su propia amiga, pueden echarle una mano; si se siente desmotivada, debe encontrar razones para seguir adelante con los estudios, o buscar otro camino.

miércoles, 17 de junio de 2015

UNA REFLEXIÓN

     Zoé ha visto hoy este vídeo de Youtube



   

      Tras verlo se ha sentido rara. Por una parte, le ha gustado sentirse llena de posibilidades, como la pastilla de jabón. Por otra, ¿qué clase de escultora tiene que ser para dar forma a esas posibilidades? Se da cuenta de que quizá se está perdiendo cosas con la actitud apática que últimamente la invade.
     Para conseguir hacer esas figuras, los escultores han tenido que pensar qué querían hacer, ponerse manos a la obra, corregir los errores que hayan cometido mientras esculpían sin desanimarse para llegar a terminar el trabajo. Sin duda los profesionales tienen ciertas aptitudes y formación que les facilitan la realización, y, además, les gusta lo que hacen. Pero el esfuerzo y el tesón han sido fundamentales en el resultado final.
     Zoé se pregunta: ¿Estarán ahí las claves que busco para mi propio éxito?

martes, 16 de junio de 2015

EL FINAL DE CURSO

     El final de curso está muy cerca.
     Zoé teme su llegada, ¿qué dirán sus padres cuando vean las notas? Seguro que se enfadan. Ha conseguido aprobar algunas asignaturas, pero ha suspendido bastantes y en eso se van a fijar. Sabe que no se ha esforzado todo lo que debía, que ha estado pendiente de otras cosas, ya se lo advirtieron. Sabe que la van a castigar, ya sabe la bronca que le van a echar, se la podrían ahorrar, ya se siente bastante culpable. E impotente porque ahora ya no puede hacer nada. ¿Para qué se va a presentar a las recuperaciones si, como mucho, aprobará una o dos más? Y eso no va a cambiar nada.
     Prefiere seguir coleccionando imágenes, escuchando música, viendo pelis, wasapeando con sus amigas o leyendo los libros que le gustan (nada que ver con los rollos que le mandan en el instituto). 
     Lo peor es que se va a quedar sin verano. Tendrá que estudiar y ella tenía otros planes.
     Lo mejor es que puede hacer cosas de ahora en adelante. A partir de ahora mismo.
     En realidad, si empieza ahora tiene que replantearse que el curso no ha acabado y que merece la pena el último esfuerzo. A lo mejor algún compañero la puede ayudar. 
     Después, podrá explicarles a sus padres lo que va a pasar. Será sincera y les dirá las notas que va a traer y cómo se siente por haber sacado esas calificaciones. La verdad es que se siente fracasada y sabe que no ha llevado bien el curso. Les va a comentar sus dificultades para organizarse y ser constante. Pero también se va a mostrar decidida a cambiar. Para demostrarlo, la han visto trabajar estos últimos días, no sabe si va a servir para mucho, pero lo ha intentado. Asumirá las consecuencias. 
     Resulta que esto era sobre el final de curso y parece el inicio de algo.

EL COMIENZO

     Hace mucho tiempo, o quizá no tanto, pero a ella le parece mucho tiempo, Zoé leyó en un libro de cuentos de Gianni Rodari que le habían regalado uno que se titulaba "¿Quién quiere comprar la ciudad de Estocolmo" y terminaba:
"Porque el mundo es de todos los niños que llegan a él, que para tenerlo no hay que pagar ni un céntimo; sólo hay que arremangarse, alargar las manos y tomarlo"
     Así se sintió ella hasta ahora. Ahora parece que todo está cambiando.
     Zoé es todo vida pero últimamente se siente confusa. Sabe lo que tiene que hacer, pero no lo hace, o no sabe cómo hacerlo. Quizá sus metas no se corresponden con lo que debe hacer. Quizá no se ha planteado sus metas. Quizá cree que no tiene capacidad o posibilidades de conseguir lo que quiere o que, al final, da igual lo que haga porque el resultado no será el que ella espera. 
     Zoé está teniendo problemas con los estudios, con sus padres e, incluso, la relación con sus amigos ya no es la que era. Parece que sus pies caminan sobre una superficie insegura, inconsistente e incómoda.
     Algo bueno: Zoé se está dando cuenta de que algo pasa. Todavía no sabe poner un nombre a lo que está sintiendo, pero las soluciones están en ella. Solo tiene que recordar la frase del cuento, arremangarse, alargar las manos y tomar el mundo.